Bañarse

No es sólo limpiar el cuerpo, es el momento del día donde no nada mas desnudas el cuerpo si no que también el alma, dejas tu esencia expuesta.

Bañarse es el momento en el que también limpias tu alma, te reencuentras contigo mismo, donde en serio puedes olvidar un poco el mundo exterior dejándote llevar por la suave sensación del agua danzante recorriendote el cuerpo, llevándose con ella toda la suciedad de la mente.

También significa analizar, perdonar, exclusivamente cuando de verdad estas al descubierto es cuando puedes mirar con toda la claridad necesaria, es cuando puedes perdonar, olvidar un poco el resto de tu vida, el resto del mundo sintiendo protección por esas cuatro paredes. Por eso, al salir del baño me siento nueva, mis energías están recargadas, pero estoy mucho menos preocupada.
No tomarse el tiempo para un buen baño es un crimen, es inutil.

Dentro de mi concepción de bañarse, no necesita ser precisamente en un baño, y tampoco tiene que ser con agua y jabón, podría ser también cuando te das el tiempo de ordenar lo que siempre dejas para después, de pintarse las uñas, cuando te arreglas los pies, tomarse el tiempo de preparar meticulosamente un desayuno perfecto viendo el programa de tv de tu preferencia, salir a tomar un café con un buen amigo, cualquier cosa que implique una sensación de relajación, satisfacción con uno mismo.